lunes, 27 de noviembre de 2006

No te mueras, Chabrol

La muerte de Robert Altman (no por esperada menos triste) me ha hecho reflexionar sobre la relación entre la edad y la capacidad creativa. El Sr. Altman era uno de los pocos cineastas que, a pesar de haber ingresado hace tiempo en la vejez, seguía haciendo películas con asombrosa asiduidad, sino que además éstas eran más que apreciables. En los últimos años, al menos presentó una que puede calificarse como obra maestra (yo la considero así): 'Gosford Park', retrato costumbrista de la Inglaterra de entreguerras y homenaje a 'La regla de juego' de Renoir en la que mezcla la intriga a lo Agatha Christie y la crítica a la despiadada lucha de clases.
Pero el caso de Altman es casi la excepción que confirma la regla. La mayoría de los directores entran en una progresiva decadencia a medida que cumplen años. Hasta los mejores han perpetrado mediocridades indignas de su importancia dentro de la historia del cine. Le pasó a Hitchcock, le ha pasado a Godard o Antonioni, le pasa a ratos a Woody Allen y le pasará a Wong Kar Wai (seguro que no le pasa, para dejarme por mentiroso). Después de rodar obra maestra tras obra maestra, dejan de ser lo que eran, como si la decadencia del cuerpo tuviese su reflejo en los misteriosos procesos del cerebro. Aunque hay cerebros que no parecen tener fecha de caducidad. Si en Estados Unidos Altman era el paradigma de gran cineasta viejuno, en Europa nos queda Claude Chabrol. El Sr. Chabrol lleva en activo desde los ya lejanos días de la nouvelle vague, pero mientras sus compañeros de promoción despuntaban con sus primeras películas, el permaneció en un discreto segundo plano al menos hasta finales de los 60, cuando llamó la atención de público y crítica con films como 'El carnicero' o 'La mujer infiel'.
Pero ha sido en la década de los 90 cuando los cinéfilos nos hermos rendido a su pies. Con cerca de 70 años ha rodado 'No va más', 'En el corazón de la mentira' o 'Gracias por el chocolate', todas ellas magníficas. Tiene pendiente de estreno una nueva película y ya rueda otra más.

En el corazon de la mentira


Chabrol es el más hitchcockiano de los cineastas actuales, ya que ha heredado lo mejor del maestro: la fórmula para combinar thriller y melodrama, primando los personajes frente a las situaciones. Los (malos) imitadores de Hitch se recrean en la trama de misterio mientras descuidan el resto de los aspectos de la película. A Chabrol lo que le interesa es criticar a la burguesía francesa de provincias, pero como quiere que el público vaya a ver sus películas (como la mayoría, digo yo), lo disfraza con un suceso que aparte a los protagonistas de su vida cotidiana: generalmente un secreto o un asesinato, a veces las dos cosas (En 'No va más' no sabemos si los ladrones son amantes o padre hija; en 'El corazón de la mentira' se acusa al protagonista de la muerte de niña; en 'La flor del mal', la cándida abuelita esconde un sórdido pasado. Pero a través de estos sucesos se nos revela el carácter de los personajes, sus miedos, sus anhelos, sus vicios. No sé si los actores en sus películas siempre están bien porque son estupendos o porque están en manos de Chabrol. Por ejemplo, una de las mejores interpretaciones de los últimos años es la de Isabelle Huppert en 'Gracias por el chocolate', que encarna a una mujer obsesionada con la bondad que no puede evitar hacer el mal; Sandrinne Bonnaire parece dos personas distintas en 'La ceremonia' y 'En el corazón de la mentira' (esta de las menos conocidas de esta etapa y quiza la mejor); en esta misma cinta Jaques Gamblin interpreta a un clarísimo precedente del doctor House (alto, desgarbado, de ojos claros y cojo), igualito excepto en su antológica mala leche.
Y un último apunte: Chabrol nos viene descubriendo a la última generación de jovencitas morbosas del cine frances. En 'La ceremonia' presentó a Virginie Ledoyen; en 'Gracias por el chocolate', a Anna Mouglalis; en 'La flor del mal', a Mélanie Doutey; y en 'La dama de honor', a Laura Smet.
Por ser uno de los mejores directores del cine mundial y no solo por las muchachitas de buen ver (en la próxima sale Ludivine Sagnier), los cinéfilos clamamos al cielo: ¡no te mueras, Chabrol!.

8 parlamentarios:

Anónimo dijo...

Lo peor de Robert Altman, no sé si lo peor, es que sólo le recordaremos por MASH, que es la película que han dicho en todos los telediarios...una lástima.
Por lo visto tengo que ver Godsfor Park y alguna de Chabrol...debo dejar de leer tanto en casa e ir más al cine.
Por cierto tengo algo que a ti a lo mejor te interes más...un bono casi nuevo de la filmoteca que me regaló un amigo americano el no lo iba a usar y yo no tengo ni el prgrama de la filmo...lo sé soy un dejado, pero si te interesa te lo regalo.

mila dijo...

Caray, yo no tengo nada para regalarte...
Simplemente iba a añadir que a lo mejor hay que esperar a ser viejo para poder valorar la senectud. O sea, que iba a decir una de mis frases sin sentido para enmascarar mi ignorancia cinematográfica.
Pero he visto la flor del mal...

Anónimo dijo...

Buenas: Tanto guiño a Hitchcock en 'Gracias por el chocolate' me pareció un poco triste. Ahora, para ver a una Huppert mala malosa, me quedo con 'La pianista'.
Altman: con la sola presencia de Kristin Scott Thomas ya merece la pena ver un bodrio (mentira, no he visto porque no quise la de los viudos cornudos con Harrison Ford), y Gosford Park es una gozada. Todos excelentes actores, aunque me recuerde a 'Un asesinato a los postres' sin gracia.

Anónimo dijo...

Una pena su muerte... Short Cuts y Kansas City, que peliculones!!!
Luisru, si te gusta, me parece que podrás encontrar una obra en comic muy parecido al mundo de Altman, en el ultimo libro de Alex Robinson, Estafados. Una historia totalmente altmantinana, para un final un tanto forzado.

Anónimo dijo...

Valmon: encantado de aceptar tu regalo. Lo de 'MASH' en los telediarios es porque a la gente debía sonarle la serie de televisión que hicieron después de la peli, aunque creo que es mucho más famosa 'Vidas cruzadas'
Mila: no hace falta que me regales nada, me basta con que te pases por aquí de vez en cuando. 'La flor del mal' me parece la más floja de los últimos Chabroles, aunque aun así me gusta mucho. La senectud debe ser una mierda por la mala ostia que tienen todos los viejunos.
Lluvia: olvido imperdonable, aun no he visto 'La pianista'. Kristin Scott Thomas es formidable (como todos los actores de Gosford Park excepto una, yo hubiese cambiado a Emily Watson, a la que tengo cierto retintín, por la maravillosa Helena Bonham Carter), pero 'Caprichos del destino' (la de los viudos cornudos con Harrison Ford) no me pareció un bodrio, un poco lenta, pero apreciable. La que es un bodrio es una que se llama 'El misterio de la villa', en la que (no sé por qué extraño motivo) también sale Sean Penn. Ambos están fatal, algo casi imposible de conseguir, pero el director lo logra.
Pikonasso: ni idea de quien es Alex Robinson, a mí me sacas de los superheroes y no tengo ni zorra. A lo máximo que llegó es a 'Maus'.

Anónimo dijo...

Vale. Si ponen 'Caprichos del destino', no haré zapping. La cinta en la que sale con Penn no sé si la he visto, pero tiene pinta de pastelón. Es que hay pelis malas que sabes que son malas y te las tragas ateniéndote a las consecuencias. Pero esas que pretenden venderte historias superbonitas que después son peores que las malas por definición...

A la que no puedo ver muy de seguido yo es a Bonham Carter, que si no, tengo pesadillas. Dios los cría y ellos se juntan. Y Emily Watson no es santa de mi devoción tampoco.

Vidas cruzadas es otra gran película, ahí estoy con Pikonasso.

Por cierto, ya he leído algo de Nothomb y me ha encantado su sentido del humor.

Anónimo dijo...

Pues yo no he leído nada de Houellebecq. Me llevas ventaja.

Anónimo dijo...

... y en España nos queda Berlanga, que además físicamente se parece a Altman!!!! Alto, canoso, chupadito y pálido.