lunes, 20 de noviembre de 2006

Merry Christmas

Llega la Navidad y por si no es suficiente descubrir que mi vecino de pared ya ha puesto un árbol con la musiquita del Jingle Bells de los huevos 24 horas al día, enciendo la televisión, que si ya de por sí da grima, y me encuentro con el gran éxito televisivo 'Un novio por Navidad'. Cómo comentar este glorioso telefilm emitido el día ¡19 de noviembre, joder!! Resulta que de repente el gordo de Santa Claus aparece con un novio de regalo para una colega que está supertriste, además de traumatizada y la vida le trata mal y sus amigos no la entienden… Con un pedazo de casa de pelotas y luego dice que es pobre y que el trabajo qué mal y que qué pobrecita soy y un dramón de pelotas por supuesto con final feliz porque sino la audiencia navideña se nos cabrea.

novio por navidad

Pero vamos a ver si nos centramos un poquito. Yo ya sé que el cine en cualquiera de sus versiones, hasta la más mala, no pretende ser real, quiere transportarnos a otras realidades y hacernos mogollón de felices viendo cómo algún pamplinas lo pasa bien o lo pasa mal o no pasa nada durante dos horas, pero coño, es que los telefilms navideños son insultantes para los humanos en general. Por eso he decidido hacer una lista de las cosas que tengo que no me gustan y por lo que las cambiaría para que el gordo vestido de rojo me las traiga o en su defecto hagan una película mala conmigo con un final feliz. Allá que vamos:

  • Tengo un gato psicópata que se sube a las rodillas de los desconocidos en vez de subirse a las mías que soy su dueña y la que le alimenta. Quiero cambiarlo por un gato que me dé cariñitos y no esté poseído por Norman Bates.
  • Tengo más de un mes de baja gracias a un médico gilipollas. Como lo de mi baja no se puede acortar quiero, querido Santa, que exploten las ruedas del coche del doctorcillo al igual que reventó cierta parte de mi cuerpo. Eso sí, que no salga nadie herido porque en las fechas en las que vamos entrar no es cuestión de causar un drama familiar.
  • Tengo una habitación compartida. Aquí hay dos opciones de cambio, la primera es que me toque el euromillón y se acabarían mis peticiones y dejaría de dar el coñazo con los posts. La opción dos es que de repente alguien decida donarme una casa por mi belleza natural y sin pedir nada a cambio por supuesto.

Y por el momento creo que ya vale de peticiones porque si no Santa se me cabrea y de telefilm ni hablamos….

15 parlamentarios:

Anónimo dijo...

Anita, tu y yo sabemos que los telefilms no se llaman telefilms, se llaman películas de Antena 3 de las 15:30. Con un gato normal te aburrirías y lo de la habitación, bueno, la vas a tener que compartir siempre, lo único que cambiará es el plasta con el que la compartas.

Anónimo dijo...

Creo que por una vez tengo que darte toda la razón. A ver si va a ser que soy así porque mi vida es como una peli de las 15:30 de Antena 3!!!! Qué horror!!!!

Anónimo dijo...

Lo siento, pero es que los gatos normales son así, mala suerte. Para obtener cariño salen más a cuenta las tortugas, pero claro, estas no son tan elegantes.

Anónimo dijo...

Tuve una tortuga, la pobre Tomasa y la muy jodía se tiró por la ventana en un ataque de libertad... Te animales para esto!!

Anónimo dijo...

¡Me has dado la razón! Debes estar realmente enferma...

Anónimo dijo...

Los grillos nunca dan problemas, excepto si es por la noche y no tienes terraza y un buen sistema de aislamiento.
Yo tuve también una tortuga, la Tortuga Mónica, que se suicidó por el procedimiento de ponerse a la velocidad del rayo bajo mi pie. Tengo buenos reflejos y torcí el tobillo rápidamente (arriesando mis ligamentos), pero la pobre ya estaba muerta. Su cadáver, por alguna propiedad extraña de las tortugas, quedó como fosilizado, y la conservamos durante mucho tiempo encima de la tele, en lugar de tener una folclórica. Qué familia tan rara.

Mi gato Merlín era igual que tu gato, pero en peor, y lo usé como molde para el gato coprotagonsita de mi novela, que supongo que estáis leyendo ya.

¿No? Qué raro.

Anónimo dijo...

Ay, por Dior, cada vez le voy a coger más asco a la Navidad, ¿qué clase de ser humano se pone el pino ya en Noviembre? Qué tortura, my gosh. Por otro lado, ya sabemos que los telefilms de Antena 3 provocan impulsos suicidas, talvez eso explique lo de tu pobre tortuga...

Anónimo dijo...

Mi hermana tenía una tortuga que la sacaba de vez en cuando a pasear (estaba acomplejada porqué ella lo que quería realmente era un perro), un buen día se olvidó que la tenía de paseo y desapareció... al cabo de unos días la encontramos disecada detrás de la cama!!
Por que no os explico lo del canario Paco que como tenía hambre le dió sopa, o lo de la hamster Olivia que acabo comiéndose a sus crías fue algo más desagradable... ya ves!!!

Anónimo dijo...

Sr. Palomares, prometo que tengo su libro en mi lista de pendientes, pero es que después de 'Psiquiatras, psicólogos y otros enfermos' tengo que hacer una pausa en mi lectura de novelas coprotagonizadas por gatos.
Joder con las tortugas, tienen un mayor índice de suicidio que los suecos.

Anónimo dijo...

De hecho las tortugas suecas han dejado de existir.

¿Qué tal el de Psiquiatras? Tengo curiosidad. La portada se parece bastante a la mía.

Anónimo dijo...

Bueno, prefiero hablar de tortugas suicidas a la navidad (con minúsculas). La desdichada de la mía pernoctaba en una caja de zapatos sin que nadie lo supiera. Tenía complejo de perro y necesitaba dormir bajo techo. Lástima que no ladrara como ellos cuando mi madre tiró la caja a la basura con ella dentro. Por qué creéis que la tortuga mora está en peligro de extinción.

Lo del periquito gilipollas lo dejo para Semana Santa.

Anónimo dijo...

Tremendo el teleflin... Espero con ansiedad el estreno de Santa Claus 3. En pantalla grande, claro.

Anónimo dijo...

Vamos desde hace mucho la navidad es El Corte Ingles, pseudopeliculas que no son aptas para diabéticos y botellones en nochevieja, perdon quise decir cotillones (es lo mismo, pero en uno pasas frio y en otro no) Ana siento lo del médico habrá que poner sus bolas de adorno en el árbol...
A los demás feliz vacación que es lo que todos esperamos.
P.S Como dice luisru con el tiempo sigues compartiendo habitación solo cambia el dueño de los ronquidos. Y si tu gato no es normal el de mi hermana, que ahgora vive conmigo lo es menos.

Anónimo dijo...

Joer...me habeis quitado, por cierto, la idea de publicar un post sobre la cutre navidad

Anónimo dijo...

Ainss. La navidad.... la familia, los amigos, las cenas de empresa, los chinos llenos de adornos horripilantes, las calles iluminadas cual burdel de Nepal, la gente pegándose por la cigala más grande, la puta lágrima cuando asoma el "vuelve a casa vuelve..." (y yo mirando a la puerta, pero mi ex no vuelve, no vuelve...), los papás noeles de trapo barato asomando por los balcones (a la carcel con el tío que trajo esa estúpida moda) y sobre todo, Ramón García diciendo adiós al viejo año (pero ese tío no está forrado ya?? que nos deje en paz, coño).
Propongo celebrar la navidad en año bisiesto cada 29 de febrero o cada 33 años (más que nada porque con la ESO los niños no comprenden que todos los años nazca el niño Jesús y que a los tres meses le crucifiquen después de haber predicado en el desierto... Un poco de rigor histórico, leñe).

smuack smuack